jueves, 31 de marzo de 2011

Las declaraciones de Manzano

Hay que reconocer que esta época es de lo más entretenida en lo que al mundillo del fútbol se refiere. Una vez se va a cercando el final de la temporada, los rumores se disparan y decenas de futbolistas son colocados en decenas de equipos, muchos de los cuales, además, parece que van contar con varios entrenadores a la vez la temporada próxima, de ser ciertas las informaciones que se publican. Es de lo más divertido, ya digo, sobre todo para gente como yo, que las tres cuartas partes de lo que lee o escucha lo considera falso, y el cuarto restante lo pone en cuarentena. Vamos, que no me creo ná, pero me parto de la risa escuchando nombres y nombres que se vinculan al Sevilla FC.

Sin embargo, hay cosas que parece que sí que se pueden dar por sentadas. De hecho, todo parece indicar que el Sevilla podría tener medio atados a tres jugadores: Amalfitano, al que conozco poco y no me atrevo a opinar sobre él, Trochowski, que es un excelente medio centro (no se es más de 30 veces internacional con Alemania por gusto), y Coke, el lateral derecho del Rayo, del que hablan bastante bien, pero que no sé hasta qué punto mejora lo que hay (incluido el Sevilla At.). No digo que no lo mejore, digo que no sé si lo mejora.

Y hay una cosa más que todos damos por sentado, y es que el próximo año el entrenador del Sevilla no será Gregorio Manzano. No creo que a nadie le quepa duda de eso. Y no lo va a ser simple y llanamente porque no encaja para nada en lo que el Sevilla está organizando para el futuro a corto plazo. Además, aparte, no está logrando cumplir con los objetivos de la entidad. No lo esté haciendo rematadamente mal, pero no está consiguiendo lo que se le pidió.

Es cierto que se puede decir que cuando cogió al equipo no contaba con una plantilla en condiciones, lo cual puede quedar demostrado por la mejora que se ha visto tras la incorporación de Medel y Rakitic. Pero hay que recordar que el denostado Manolo Jiménez hizo al Sevilla tercero con una dupla en la media formada por Duscher y Romaric, con Mosquera en la defensa y Chevantón (no Negredo) en la punta. Si a Jiménez se le formó la que se le formó con esa plantilla y aquellos resultados, ¿por qué con Manzano el tratamiento va a ser distinto cuando no hay ni resultados? Y eso que la presión que recae sobre él y sobre el equipo no tiene nada que ver con la que había por entonces.

Por eso me han parecido un poco ridículas las declaraciones que el jiennense ha hecho diciendo que estaría dispuesto a renovar incluso antes de junio. Nos ha jodido. Pues claro que renovaría. Me ha recordado aquello que dijo Jiménez aquella temporada en cuestión acerca de que no sabía si firmaría un año más porque eso dependía del equipo y el proyecto que se le presentase. O sea, que se lleva todo el año en la cuerda floja, criticado por todas partes (otra cosa es que la intensidad de esa crítica fuese justa), y va y se pone así de espléndido. Aquel comentario estaba fuera de lugar, del mismo modo que lo está este que ha hecho Manzano.

Hay quien dice que al de Jaen se le debería dar una oportunidad, que no podemos cambiar de entrenador todas las temporadas. Y no creo que le falte razón, algo de ella si que tiene. Pero Manzano ha defraudado considerablemente este año. Se esperaba mucho más de él. No ha mejorado a Jiménez. Ni mucho menos. Ni siquiera en el nivel de juego, eso que tanto se le echaba en cara al de Arahal. Darle continuidad a Manzano sería como reconocer que el Sevilla ha decrecido en el último año, ya que nos conformaríamos con menos de lo que exigíamos el año pasado, y yo creo que eso no es así. Yo creo que el Sevilla hoy tiene mejor plantilla que en la 2008/2009, cuando fuimos terceros. Sobre todo con Medel y Rakitic. Y yo no digo que deberíamos estar terceros. Acepto que el año no está siendo bueno. Pero es que estamos a 12 puntos de los puestos de Champions. No a dos, ni a cinco, ni a ocho. A doce. Es una barbaridad. Es demasiado.

No, señores. Manzano no ha sacado rendimiento al equipo. Ni de lejos. Insisto. No exijo que estemos terceros o cuartos. Y acepto una bajada de prestaciones este año porque eso le ocurre a todos los clubes del mundo. Pero ua cosa es eso y otra doce puntos de desventaja.

Además, para colmo, está lo de la cantera. Con la generación tan sensacional de futbolistas que tenemos en el Sevilla At., nadie puede explicarse que Luna esté en el Almería, que Rodri apenas tenga minutos o que Campaña y, sobre todo, Luis Alberto aún no hayan ni siquiera debutado. Lo de Cala no lo meto porque eso fue anterior a Manzano.

El Sevilla del año que viene se tiene que asentar en una serie de jugadores que ya están y que tienen que asumir el mando (alguno ya lo ha hecho), como Sergio Sanchez, Fazio, Medel, Rakitic, Navas, Perotti o Negredo; también en algún que otro fichaje que apuntale al equipo, y en eso está Monchi y su departamento; y en la cantera, por supuesto, sin lugar a dudas. Lo dicho, con la generación que viene, no es para menos.

Ya lo dijo Guardiola hace no mucho: la cantera del Barcelona no es ni mejor ni peor que la de cualquier club de España. La única diferencia es que allí ponen a los jugadores y en otros sitios no. Y Manzano no puede aspirar a seguir en el Sevilla si no pone para nada a los que están llamados a ser el futuro del equipo. Futuro que debe ir haciéndose presente a la voz de ya.

Si los jugadores más jóvenes necesitan tiempo para adaptarse y coger experiencia, mientras más tardemos en ponerlos, más tarde explotarán.

O más posibilidades habrá de que llegue alguien y nos los birle.

Por todo ello, Gregorio Manzano, no creo que a nadie le quepa duda de que no será usted el entrenador del Sevilla el año que viene. Yo no pongo en duda su valía como técnico, pero el Sevilla actual necesita otra cosa.

miércoles, 30 de marzo de 2011

Lo del Patético es increíble

Acabo de leer una noticia en el diario AS que me ha dejado, otra vez, alucinado. Por lo visto, según esta gente, el Atlético de Madrid está “mejor colocado” que nadie para lograr el fichaje del lateral derecho del Rayo Vallecano, Coke.

Y no es que a mí me alucine que estos del Patético anden detrás del lateral derecho del Rayo. Tampoco que hayan podido tomar la delantera en la pugna por conseguir esa adquisición, aunque no sé en qué se basan para afirmar tal extremo. Ni siquiera que esa noticia surja justo horas después de que se diga en Sevilla que nuestro equipo lo puede tener ya hecho con él, a la espera de lo que ocurra con el club en el que ahora mismo juega.

Bueno, a decir verdad, estos del AS dicen que ya adelantaron la noticia del interés del Atlético por este muchacho el día 16 de noviembre. Claro que con la cantidad de noticias que adelantan, cualquiera sabe. El caso es que no se ha vuelto a hablar de eso hasta… hasta horas después de que se haya dicho que igual ya lo tiene cerrado con el Sevilla.

Pero ni siquiera esto de que se adelanten las noticias me alucina, de verdad.

A mí lo que me alucina es que no hay jugador en el que esté interesado el Sevilla que no se meta por medio el Atlético de Madrid. Me parece increíble, como si fuera una manía obsesiva. No sé si será cierto eso que decía aquel de que el Patético no tiene un secretario técnico, sino un detective que espía a Monchi. O igual es que los planetas y las constelaciones se alinean continuamente para que se de una y otra vez la casualidad de que los jugadores que pretenden ambos equipos sean siempre los mismos. Y los entrenadores también.

Lo curioso es que, salvo el tema de Ujfalusi, el cual al final tuvo que soltar la pasta para indemnizar al Sevilla porque este sí que ya lo tenía hecho con nosotros e incumplió el acuerdo, ninguno de esos jugadores en supuesta pugna acaba en el Atlético de Madrid. O acaba en el Sevilla o no se produce traspaso alguno. Ahí está el caso de Rakitic, por citar el último caso que se ha dado.

Pero es que es alucinante, en serio, es que siempre pasa lo mismo, no me lo puedo creer. De modo que José María del Nido se descuelga con unas declaraciones afirmando que le gustaría dar a Joaquín Caparrós un equipo ganador en un futuro a medio plazo, y acto seguido surge la noticia de que el de Utrera es uno de los favoritos para entrenar al Atlético el año que viene. Es que no falla. Es que es una tras otra y tras otra.

Y se podría decir que es que, como son rivales directos y de más o menos el mismo nivel, pues se fijan en los mismos futbolistas.

Y entonces yo contestaría: ¿pero no eran ellos los grandes y nosotros unos recién llegados? ¿Y por qué entonces nunca se relacionan a esos jugadores con el Valencia, por poner el ejemplo de otro equipo de un nivel parecido?

Lo que yo pienso es que en el Atlético de Madrid no hacen más que dar palos de ciego. Que no saben donde mirar, cómo negociar, a quien seguir… y como el Sevilla acierta más que falla en sus fichajes (salvo en alguna que otra racha puntual), pues cada vez que se relaciona a alguien con el Sevilla, allá van ellos.

¿Qué otra explicación puede haber?

Me refiero a una explicación medio coherente, no me vale lo de los planetas y constelaciones.

martes, 29 de marzo de 2011

Lo que no acabo de entender sobre la huelga

Vaya por delante que yo comprendo perfectamente las razones por las que los clubes (muchos clubes) pretenden hacer lo que sea para que no se emitan partidos en abierto y así poder cobrar por ellos. Si, hoy día, estos clubes son entidades privadas, tienen derecho a vender su producto sin que nadie venga a obligarle a darlo de modo gratuito.

 Claro que, caso de no ofrecer partidos en abierto, unos se beneficiarían más que otros, ya que el reparto actual de los dineros de la televisión es el que es. Por tanto, se comprende también que esos mismos equipos que han emprendido una cruzada en pos de un mejor reparto de dichos dineros ahora se desmarquen de la postura oficial de la liga, es decir, de los que no comparten la propuesta de reparto que estos “disidentes” defienden

En todo este asunto, nosotros, los aficionados, no pintamos nada. Aquí se trata de que los grandes quieren ver la pasta y han convencido al resto para que les sigan la gracia. Gracia en la que ellos salen más beneficiados que ninguno. Con diferencia. Pero no todos han picado el anzuelo. Ni siquiera por las migajas del pastel. Y ocurre que Del Nido no quiere prestarse a intensificar esa medida de presión que es una huelga para que otros se lo lleven calentito. No es una cuestión de dinero. El Sevilla saldría perdiendo si se sigue ofreciendo fútbol en abierto. Pero perdería mucho menos que otros. Es una cuestión de honor, de dignidad, de no plegarse a lo que manden los poderosos, de no lamerles el culo ofreciendo el apoyo para sus reivindicaciones. Si los dos grandes quieren presionar al gobierno, que lo hagan, pero que no cuenten con el Sevilla, porque al Sevilla se le ha perdido poco en esa disputa. Algo pierde, ya digo, pero poco. Muy poco. Muchísimo menos que los mastodontes.

Para colmo, Del Nido utiliza este asunto para enlazarlo con el otro que se refiere a las televisiones. Es que es de cajón. Si los grandes se niegan a aceptar un reparto más justo de los dineros, ¿por qué el Sevilla les va a apoyar para conseguir más dinero, el cual se seguirá repartiendo de ese  modo tan injusto?

Por otro lado, hay una cosa que no entiendo. Según tengo entendido, en España, igual que en cualquier país democrático avanzado, el derecho a la huelga es eso, un derecho, no una obligación. Cuando una asamblea de trabajadores decide ir a una huelga, eso no quiere decir que todos los trabajadores que representa dicha asamblea tengan la obligación de no ir a trabajar. ¿Por qué, entonces, el Sevilla está obligado a no jugar si la asamblea de la liga vota en mayoría hacer huelga? Y mucho más cuando su rival, casualmente, tampoco quiere hacer huelga. ¿Por qué tenemos que estar a expensas de lo diga o deje de decir un juez? Con el follón en el que nos pueden meter por culpa del retraso en el final de la liga. Debe haber un motivo legal que desconozco, está claro, pero no deja de ser algo chocante cuando menos.

Por otro lado, yo no sé si esa medida de no dar ningún partido en abierto será beneficiosa a futuro para los clubes. A corto plazo, está claro que sí. Pero en mi caso, por poner un ejemplo, yo no me pierdo un partido del Sevilla que den en televisión en abierto, caso de no poder ir al estadio. Un partido en que seamos visitantes, para que no quepa ninguna duda. Sin embargo, ¿me gastaría un dinero en verlo por televisión? ¿No sería mejor ir a verlo a un bar? Así al menos lo vives con algo de ambiente. O sea, que puede que un partido de pago lo vean, digamos, cien personas, pero que sólo uno lo pague. El dueño del bar. Claro que si se dan cuenta de eso, pueden ponerse en plan SGAE y prohibir dar esos partidos en lugares de concurrencia pública, quién sabe. Por otra parte, esa medida favorecería el hecho de que la gente acudiera a los estadios. Ya de pagar, y suponiendo que no se puede acudir a los bares, igual es mejor ir a verlo a los coliseos aunque costase un poco más caro. Allí al menos aún se puede fumar. Aún.

Lo que es evidente es que, si mucha gente actúa como yo, esos partidos los verán muchas menos personas que si fuesen en abierto. Al ser la audiencia menor, el valor de la publicidad decaería, y con ello los ingresos de las televisiones por ese concepto. ¿Compensaría el pago por visión esa caída de beneficios?

Estaría por ver. Claro que, si no compensase, habría que buscar nuevos mercados, es decir, más gente que viese esos partidos. Y el mercado potencial emergente por excelencia es Asia, por supuesto. Por tanto, ¿cuánto tardarían en poner los partidos a las tres de la tarde? En ese caso, volverían a decaer los espectadores en los graderíos. No sé yo si nos acostumbraríamos a ver los partidos a esas horas. Y mucho menos en el sur. Y muchísimo menos aún cuando vayan llegando los meses de calor, o al principio de las temporadas.

Todo esto son suposiciones, no tengo nada claro lo que ocurriría. Y es de suponer también que todas estas preguntas se las han hecho los clubes que apoyan esta medida de la huelga para forzar el hecho de que no se den partidos en abierto. Sin embargo, me da a mi que no es así. Me da a mi que están cegados por el dinero fácil a corto plazo, aparte de aplastados por monumentales deudas, las cuales apenas se aplacarían con los ingresos extras de esos partidos. Si todo el mundo cobrase lo que percibirían Madrid y Barcelona por quitar el partido en abierto, quizás. Pero como eso no es así ni mucho menos…

A mí todo este asunto me da muy mala espina. No se me quita de la cabeza que hay una montonera de intereses ocultos de los que no tenemos ni idea los comunes mortales como yo. No hago más que hacerme preguntas y preguntas para las cuales no hallo ninguna respuesta convincente.

Y entre todas esas preguntas, hay una que retumba en mi cabeza de un modo especial:

Yo entiendo que si los controladores aéreos se ponen en huelga, el Estado se acojona porque el caos que se monta es de consideración (lo hemos visto hace no mucho). Aparte del perjuicio económico que se produce. Igual pasa con cualquier empresa a la que los trabajadores presionan convocando una huelga. Pierden dinero y eso les duele, con lo que se avienen a negociar.

Pero, ¿qué coño le importa al Estado que una jornada de liga se juegue en una fecha u otra?

¿Por qué están tan convencidos los clubes de que esa medida va provocar que el legislador español reconsidere una postura que considera conveniente, hasta el punto de cambiar una ley?

Vuelvo a decir, o yo soy un ingenuo, inocente y absolutamente ignorante, o aquí hay algo que no me cuadra. Pero en absoluto

lunes, 28 de marzo de 2011

Un ser humano extraordinario

Lo primero de todo, quiero pedir disculpas a los lectores de este blog por haberlo tenido abandonado tanto tiempo. Otra vez. Sé que son pocos, pero es emocionante comprobar que también fieles. A los que me habéis escrito interesándoos por cómo me encuentro y por las razones del parón (ahora y en otros parones anteriores), muchísimas gracias.

A mí me encanta escribir, es casi un vicio. Cuando no escribo, hablo solo por la calle, os lo juro. Escribir para mí es casi una terapia para no volverme loco. Y si dejo de hacerlo es por causas importantes. En este caso, llevo desde el verano embarcado en un proyecto empresarial que se ha llevado la totalidad de mi tiempo en los últimos dos o tres meses, y que por fin ha visto la luz, con lo que de nuevo tengo tiempo para esto que tanto me gusta.

Próximamente os contaré de qué va y pondré un banner en el blog. Quien mejor que yo para hacerme publicidad a mi mismo, ¿no os parece?

Y dicho esto, paso inmediatamente a hablar del tema que hoy me ha dejado encandilado.

Hace años, allá por 1991 creo recordar, el Diario ABC sacó un coleccionable sobre la historia del Sevilla FC. Cada fascículo se vendía el domingo, junto al periódico y a la revista semanal, y evidentemente yo lo coleccioné y lo guardo en casa como oro en paño, encuadernado en esas tapas en marrón y oro que regalaron, no recuerdo si con la primera entrega o con la última. Qué más da.

De aquella, el Sevilla era un equipo mediocre, de tercera fila podríamos decir. Estaban el Madrid y el Barcelona, por supuesto, luego iban el Atlético y el Valencia (como casi siempre), incluso el Athletic de Bilbao, que era más grande que hoy día. Y aún no había explotado el Súper Depor. Para colmo, cada año había un equipo revelación que se nos colaba por delante. Recuerdo grandísimas temporadas del Osasuna, del Celta, del Español, de la Real Sociedad, del Sporting de Gijón, de muchos equipos. Nosotros nunca. Nosotros siempre teníamos por delante a los cinco de siempre, al equipo revelación y a menudo a alguno que otro más, con lo que eso de clasificarnos para la UEFA solía ser el gran objetivo que cuando se conseguía, muy de cuando en cuando, era digno de celebración en la Puerta de Jerez. Todos sabéis de lo que hablo a nada que superéis los veinticinco. Y si no también, está claro, no creo que nadie sea ajeno a esto.

Yo era un adolescente en la época en que se publicó ese coleccionable. Había oído hablar a mi abuelo acerca de los Arza, Campanal, Busto y compañía. Y a mi padre, que estudió en los Salesianos de Alcalá, contando cómo se escapaban los chavales para ver a los jugadores cuando se concentraban en Oromana. Pero aquella fue la primera vez que vi fotos de aquellos legendarios jugadores, que incluso llegaron a ganar una liga. Y me preguntaba si algún día conocería en primera persona algo parecido.

Pues bien, acabo de leer la información de Diario de Sevilla acerca de la obra solidaria de Kanouté en Bamako. Y también sus declaraciones desde la capital de Mali aclarando sus palabras, esas que fueron tergiversadas, e insistiendo en que él no se quiere ir del Sevilla. Ni siquiera mejorar el contrato o forzar una nueva renovación. Y que sólo se marchará cuando no se vea capaz de ser titular, cuando no pueda aportar y ayudar al Sevilla. Textualmente, no quiere cobrar dinero por ser suplente, sólo por que sea un referente en el vestuario. Vamos, que cuando no pueda merecer con su juego el sueldo que gana, se irá. Y sin malos rollos. Con la cabeza alta. “que la gente se acuerde de mí de forma positiva", concluye.

Tengo que reconocer que me he emocionado al leerlo. Me he emocionado porque creo que aún no soy del todo consciente de lo que estoy teniendo la suerte de vivir. Estamos sin duda ante un personaje de la altura de los Arza, Campanal, Busto y compañía que decía antes. Y digo personaje (no futbolista) porque Kanouté es mucho más que un jugador de fútbol. Muchísimo más. Es un ser humano extraordinario que se dedica a jugar al fútbol, y que lo hace de una manera excelsa. Pero eso no es más que una parte de su extraordinario ser. Decía un lector en los comentarios de la noticia que unos anuncian bolis solidarios y otros aflojan la guita. Sin desmerecer a nadie, no se puede definir mejor lo que pienso.

Hace veinte años, admirando aquel coleccionable del Diario ABC, me preguntaba si algún día tendría la oportunidad de ver a jugadores de la entidad de aquellos históricos. Hoy, cuando estamos viviendo la peor temporada del Sevilla seguramente del último decenio (poco más o menos), me enorgullezco de decir que sí. Que he tenido la oportunidad. Que la sigo teniendo y que así será al menos durante un año y pico más por lo menos.

El día que Kanouté se vaya del Sevilla, ya sea porque se retire o porque no de más de si al nivel de la liga española, no habrá forma humana de agradecerle lo que nos ha dado. Como futbolista y como ejemplo de persona humana. No habrá forma humana. Yo, particularmente, no sé como le podría agradecer el hecho de haberme permitido vivir eso que hace veinte años no era más que una quimera. Las batallitas de mi abuelo. Que si él lo contaba, sería verdad, pero qué complicado era imaginarse al Sevilla ganando títulos y disfrutando de jugadores históricos de aquel nivel.

Ya no es necesario imaginarse nada.

¿Cómo se puede agradecer eso?

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